Tómame, oh noche eterna, en tus
brazos y llámame hijo.
como el paisaje al morir el día.
regresé a la noche antigua y serena ...
Desvestí la realeza, cuerpo y alma...
Fernado Pessoa
23 noviembre 2011
Venecia en soledad
Tómame, oh noche eterna, en tus
brazos y llámame hijo.
como el paisaje al morir el día. regresé a la noche antigua y serena ...Desvestí la realeza, cuerpo y alma...
Son cuatro obras preciosas, no puedo decantarme por una en concreto porque sería ir en contra de la belleza que has creado, magnífico tu trabajo Andrés, un gran abrazo para ti amigo mío
ResponderEliminarHacía tiempo que no "paseaba" por tus colores. Como siempre ha sido un placer... y difícil de quedarse con una sola. Precioso también el encabezamiento. Me sumerjo y me empapo en esos colores. Un abrazo
ResponderEliminarQué recuerdos me traen estos pasajes, en que tu pincel nos trae el alma de las aguas estancadas de la Venecia eterna.
ResponderEliminarPor cierto qué acierto con esa portada sobre la orilla del Genil a su paso por los Escolapios. Qué recuerdos de juventud y humo de Bisontes.
Un abrazo.
El poema y los reflejos de la luz en tus colores eternos son un placer para el espíritu.
ResponderEliminarUn beso
Me quedé prendada de tus colores y tus formas que siempre transformas en esos maravillosos cuadros, y además con hermosas palabras...
ResponderEliminarPerfecto el conjunto.
Besitos.
Italia y tu pincel...Desde que ví tus obras expuestas en el Palacio de los Velada en Ávila y quedé prendado de ellas, siempre he seguido tu creación, y más desde que me encontraron tu blog y pude seguirlo. Cuando la belleza desborda por todos los lados, es inútil describirla con palabras. Gracias por las emociones que transmites.
ResponderEliminarPreciosos colores...
ResponderEliminarComo para tener un mero accidente con un amor esencial...
Un saludo.
ESpléndido, me he quedado atrapada
ResponderEliminaren esta entrada tuya
Un abrazo
Stella
Hola Andrés, me alegra ver que sigues como te conocí.
ResponderEliminarFelicidades.
¡Qué preciosidad!...la poesía y las obras, me enamoró la ultima, conseguir esa fuerza con una paleta monocromo es un logro, tus tonalidades como siempre azules,rosados y dorados cálidos me recuerdan el arco iris. Abrazo
ResponderEliminarPasé de nuevo para que acompañarte y así en Venecia ya no te sintieras en soledad.
ResponderEliminarBesitos.
Amor es lo esencial, sexo mero accidente.
ResponderEliminar¡¡Contundente!!
El sexo pasa y se olvida, el amor perdura en el tiempo.
Son tan bellos y profundos tus cuadros como ese mar que nos acompaña en nuestra Andalucía.
Un beso